Descripción
Autor
Texto en catalán
Formato
Instrumentación
Duración
Páginas
Año de composición
ISMN
Ref.
Si el mundo ya es tan hermoso, Señor,
si se mira con vuestra paz en nuestros ojos,
¿qué más nos podéis dar en otra vida?
Así comienza el famoso Canto Espiritual de Joan Maragall. En Dimecres de Cendra, personifica este dilema de fe con el encuentro de una chica joven y bonita que asiste a misa y del sacerdote que le querría poner ceniza en la frente como símbolo de la mortalidad y de la impureza que la Iglesia quiere que sienta. Con sus siete «noes» es representativo de la ambivalencia del poeta modernista hacia ciertas instituciones (era, en otros aspectos, un católico devoto) y de su feminismo natural.
Esta composición expresa la tensión en el corazón del poema yuxtaponiendo la música de dos compositores, un gran maestro y yo mismo. El Miserere mei de Gregorio Allegri, compuesto para la Capilla Sixtina en los alrededores de 1638 (y supuestamente escrito de memoria por Mozart a los 14 años) ahora se canta por todo el mundo, a menudo el Miércoles de Ceniza. Mi música, sólo para voces femeninas, creció a partir del pequeño adorno de las palabras “de la taula”.
(Ian Shaw)
No hay valoraciones aún.