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ISMN
Referencia
Todo lo que acontece en los barcos me fascina especialmente, por eso cuando me enteré que antiguamente las trompetas, durante más de dos siglos en los barcos transoceánicos, fueron las encargadas mediante «señales», de marcar los cambios de guardia (B), saludar a otros barcos (A), avisar a la tripulación para las reuniones (C) o la llamada a los botes salvavidas (D), me inspiró al instante esta breve pieza. En la obra las tres primeras «señales» se van alternando y repitiendo, y la última como acontece, acaba en un inevitable naufragio. A pesar del mar, en un barco casi siempre encontramos la solidez, la rutina, horizontes sin fin, la fuerza, la quietud, soledad, viento o no, y todo. Es la magia de hacer en la inestabilidad algo estable, que es lo que siempre persigo en mi música. (Jesús González)
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