Melodia, Llegenda i Tarantel·la (Melodía, Leyenda y Tarantela)

Melodía, Leyenda y Tarantel·la son las tres obras que Margarita Orfila compuso para violonchelo y piano, todas ellas en un solo movimiento. Pertenecen a dos momentos vitales diferentes: la primera es una pieza de juventud, mientras que las otras fueron escritas dos décadas después, cuando Margarida Orfila reanudó la labor compositiva después de unos años dedicada a la familia por el nacimiento y crianza de sus hijos.

Melodía data del año 1908 y es una transcripción para violonchelo y piano de la tercera de las Tres Melodías para piano que hizo la misma compositora, obra galardonada con el cuarto premio en el certamen “Fiesta de Juventud” de 1912 organizado por la revista Ilustración Catalana. Escrita en la tonalidad de Re Major –a diferencia de la versión original para piano solo que está en Mi Mayor–, es una pieza de gran inspiración melódica donde queda patente el gusto por las modulaciones de esta autora.

Llegenda i Tarantel·la fueron escritas en 1929 y estrenadas conjuntamente por la propia Margarita Orfila en el piano y su hijo Francisco Alfonso Orfila (1919-2006) en el violonchelo, el día 11 de mayo de 1941 en la Escuela Municipal de Música de Barcelona. Las reseñas de este concierto publicadas en la prensa de la época se refieren a la sana inspiración de la compositora, así como la amplia técnica y el vigoroso temperamento del joven violonchelista. Encontramos dos títulos alternativos para Leyenda: Elegia o Impresión, todos ellos dan idea del carácter de la obra, cantada y expresiva, con una sección central más movida. Tarantel·la, en cambio, contrasta por su vivacidad con el ritmo típico de la danza popular del mismo nombre, en la que también disfrutamos de momentos de intensa expresividad y audaces modulaciones.